La estrella de Donald Trump le fue otorgada en 2007 por su participación en “The Apprentice” y como productor del certamen de Miss Universo
En un esfuerzo sostenido a lo largo de tres años, el residente de Hollywood Hills, Andrew Rudick, sumió la tarea de eliminar la estrella de Donald Trump del Paseo de la Fama de Hollywood. Aunque la controversia ha generado vandalismo y manifestaciones, la falta de un proceso claro para la eliminación de estrellas plantea desafíos significativos.
Rudick ha presentado solicitudes de registros públicos, recuperado documentos judiciales y participado en reuniones del Consejo Municipal para lograr su objetivo. La estrella de Trump, otorgada en 2007 por su participación en “The Apprentice” y como productor del certamen de Miss Universo, ha sido objeto de desacuerdo debido a las acciones políticas del expresidente.
A pesar de la oposición de varios miembros del Consejo Municipal a Trump, la ausencia de un procedimiento establecido para la eliminación de estrellas complica la situación. Múltiples entidades, incluido el Consejo Municipal, la Cámara de Comercio de Hollywood y el Fideicomiso Histórico de Hollywood, tienen roles en la administración del Paseo de la Fama, pero la responsabilidad directa para retirar una estrella sigue sin definirse.
A big thank you to the nearly 600 people who signed the petition over the last two days!
Tell @HugoForCD13 and @LACityCouncil that it’s time to rid our street of fascism. https://t.co/aMSgUwXhSC
— Andrew Rudick (@andrew_rudick) December 28, 2023
La estrella de Trump ha sido objeto de actos de vandalismo, con reparaciones que superan los $20,000 desde 2016. Aunque en 2015 la Cámara de Comercio de Hollywood afirmó que las estrellas no podían retirarse, su postura ha cambiado desde entonces. Ana Martinez, vicepresidenta de relaciones con los medios y talentos de la Cámara, señala que la entidad no posee la autoridad para quitar una estrella.
La falta de claridad sobre quién tiene la facultad para eliminar una estrella ha llevado a Rudick a abogar por la participación del Consejo Municipal, quienes aprobaron una resolución en 2021 llamando a la destitución de Trump por su papel en el asalto al Capitolio en enero del mismo año.
La posición del Partido Republicano del Condado de Los Ángeles es que cualquier intento de retirar la estrella sería un desperdicio de tiempo y recursos, mientras que Rudick insiste en que la estrella respalda a alguien que intentó un golpe contra Estados Unidos.
El proceso de eliminación de estrellas en el Paseo de la Fama no tiene precedentes. Aunque en 2018 el Consejo de la Ciudad de West Hollywood solicitó la retirada de la estrella de Trump, la resolución no se llevó a cabo. Aunque el Paseo de la Fama cuenta con protecciones como Monumento Histórico-Cultural, cambiar o retirar una estrella no violaría estas medidas, según el Departamento de Planificación de la Ciudad.
La incertidumbre sobre el destino de la estrella de Trump destaca la complejidad de las decisiones relacionadas con íconos públicos en el contexto del patrimonio histórico y cultural. El debate continúa, sin que se vislumbre un camino claro hacia la resolución de esta polémica.