No admiten celulares durante las clases, pero cabe aclarar que no se los quitan
Hay una ley en el Condado de Orange en California que prohíbe el uso de celulares y aparatos electrónicos en escuelas públicas.
No admiten estos aparatos durante las clases, pero cabe aclarar que no se los quitan, los mantienen en sus mochilas, por cualquier emergencia.
Los celulares deben estar silenciados y guardados, a menos que les autoricen su uso. La medida se extiende a relojes inteligentes y auriculares.
Los padres pueden llamarlos y los alumnos podrán responder.
El programa de Telemundo, La mesa caliente, hizo eco de esta noticia y dio a conocer que los resultados en dos meses han sido espectaculares.
Los beneficios son muchos, ya que ha permitido que los alumnos interactúen entre sí de mayor manera. Están más activos en los deportes.
Fortalecen amistades, al estar más en contacto y uno muy importante, es que evita el acoso escolar o ciberbullying, pues no tienen sus aparatos para grabar o acosar a nadie.
Hay estudios que indican que usar teléfonos celulares en clase ocasiona que se distraigan con mayor facilidad.
Algunos datos específicos sobre la importancia de no usar el celular en las escuelas incluyen:
Distracciones: El uso de móviles en clase puede ser una gran distracción para los estudiantes, quienes pueden estar tentados a revisar sus mensajes, jugar juegos o navegar por Internet, lo que puede dificultarles concentrarse en la lección.
Pérdida de información: Los alumnos que usan teléfonos celulares en clase pueden perderse información importante. Pueden perderse una explicación importante del profesor o un punto clave de la lección.
Notas más bajas: Los estudiantes que usan smartphones en clase tienen más probabilidades de obtener notas más bajas.
Fomentar el ciberacoso: Es un problema creciente en las escuelas. Pueden usar sus teléfonos, para enviar mensajes de texto o publicar contenido en línea que sea dañino o amenazante para otras personas.