Trump les pidió que incluyeran su cameo en la cinta como condición para prestarles el hotel
¿Te acuerdas de cuando viste a un niño con un gorro de lana y una mochila roja caminando por el lobby del Hotel Plaza en Nueva York? Si es así, seguramente te preguntaste quién era ese personaje y por qué apareció en la película “Mi Pobre Angelito 2”, una secuela del clásico navideño “Mi Pobre Angelito” protagonizado por Macaulay Culkin.
Pues bien, resulta que ese personaje era Donald Trump, el actual presidente de Estados Unidos, quien hizo una breve aparición en la cinta como contraparte para que la producción pudiera utilizar el Hotel Plaza. ¿Quieres saber más sobre esta curiosa historia? Sigue leyendo y te lo contamos.
El Hotel Plaza es uno de los hoteles más famosos y lujosos del mundo, ubicado en el corazón de Manhattan. Fue fundado en 1907 y ha sido escenario de numerosos eventos históricos, culturales y políticos.
Entre sus huéspedes más ilustres se encuentran personajes como John F. Kennedy, Marilyn Monroe, Winston Churchill o Barack Obama.
En 1988, el hotel fue adquirido por Donald Trump, quien lo convirtió en su propiedad personal. Durante su gestión como dueño del hotel, Trump realizó varias reformas y mejoras al edificio, así como aumentó su fama y prestigio.
Sin embargo, también se ganó la crítica y el rechazo de muchos vecinos y residentes del hotel, quienes lo acusaron de ser arrogante, grosero e irrespetuoso.
Entre las cosas que hizo Trump durante su propiedad del hotel se encuentra exigir ser parte de las películas que quisieran grabar en sus dependencias.
Según reveló el director Chris Columbus, quien dirigió “Mi Pobre Angelito 2”, Trump les pidió que incluyeran su cameo en la cinta como condición para prestarles el hotel.
Los resultados fueron sorprendentes: aunque algunas personas se rieron o se confundieron con la aparición del magnate, otras lo encontraron divertido o gracioso. De hecho, algunos incluso lo consideraron una forma original o ingeniosa de promocionar el hotel.
Así pues, esta fue la regla que puso Donald Trump para grabar “Mi Pobre Angelito 2” en el Hotel Plaza: aparecer brevemente como contraparte para poder usar uno de los hoteles más emblemáticos del mundo. Una regla que quizás no todos hubieran aceptado o entendido.