Xbox comenzará a bloquear accesorios de terceros

En un audaz movimiento para preservar la integridad del juego, Microsoft ha anunciado que comenzará a bloquear todos los accesorios de terceros no certificados en Xbox.

Esto significa que los sistemas de control de retroceso, a menudo etiquetados como “trampas” por la comunidad de jugadores, pronto serán cosa del pasado en sus consolas.

Además, los mandos y otros accesorios que no cuenten con la certificación oficial de la compañía también dejarán de funcionar.

Este es un paso importante para garantizar una experiencia de juego justa y equitativa para todos los usuarios de Xbox.

Microsoft va por los tramposos

A pesar de este cambio, los controladores Xbox de terceros que son parte del programa de socios de hardware certificado de Microsoft no se verán afectados.

Sin embargo, cualquier fabricante de accesorios que no haya recibido la bendición oficial de Microsoft podría encontrarse con un bloqueo.

Esto tiene implicaciones directas para dispositivos utilizados por jugadores deshonestos, como XIM, Cronus Zen y ReaSnow S1, que pronto podrían quedar obsoletos.

Este es un paso significativo hacia la creación de un entorno de juego más saludable y equitativo, especialmente en los títulos FPS donde estos dispositivos pueden dar una ventaja injusta.

Estos adaptadores, a menudo utilizados para manipular la entrada del controlador, permiten a los usuarios de ratón y teclado aprovechar las ventajas del aim assist y reducir el retroceso de las armas en los juegos.

Sin embargo, parece que los días de Cronos en Xbox están contados. Este cambio marca el final de una era y el comienzo de una nueva, donde la igualdad de condiciones es la norma.

De hecho, gigantes del gaming como Activision, Bungie y Ubisoft han emprendido acciones para bloquear estos dispositivos de suplantación de hardware.

Han implementado restricciones y prohibiciones en títulos populares como Call of Duty, Destiny 2 y Rainbow Six Siege, aunque sus esfuerzos hasta ahora han tenido un éxito limitado.

En Call of Duty, por ejemplo, se introdujo recientemente una advertencia para los jugadores que utilizan estos sistemas. Sin embargo, a juzgar por las quejas de muchos usuarios, parece que esta medida ha tenido poco impacto.