Restaurantes lujosos en Washington que sí o sí debes visitar
¡Prepárate para deleitar tus papilas gustativas con algunas de las mejores experiencias culinarias que Washington tiene para ofrecer!
Washington es conocida por su vibrante escena culinaria y su amplia variedad de restaurantes de lujo.
Desde elegantes comedores con impresionantes vistas hasta acogedores bistros con menús innovadores, hay algo para todos los gustos en esta ciudad.
Exploraremos algunos de los mejores restaurantes de lujo en Washington y lo que los hace únicos.
¡Prepárate para deleitar tus papilas gustativas con algunas de las mejores experiencias culinarias que Washington tiene para ofrecer!
The Dabney
Entrar en este lugar es como encontrar el final de un arcoíris gracias a su espacio elegante de una casa de campo con una cocina abierta, un horno de leña y una multitud bien vestida.
La cocina de The Dabney adecuada para cualquiera que busque profundizar en la comida regional del Atlántico medio a través de un menú que combina sabores tradicionales e inesperados.
No olvides de proba los platos creativos, incluido el pollo y las albóndigas muy caseras.
Gravitas
El chef Matt Baker transforma los productos locales en artículos modernos y profundamente complejos.
El buen servicio de Gravitas y la cocina abierta realzan el atractivo.
Se ofrecen innumerables opciones en la comida de varios platos. Los puntos destacados incluyen una velouté de castañas vertido sobre un pastel de dátiles con mermelada de pera y vainilla y terrina de foie gras.
minibar
El salón es ideal para un poco de champán, después de lo cual los invitados pueden sentarse en una posición elevada en el mostrador, ubicado alrededor del espacio de trabajo de acero inoxidable de los chefs que, literalmente, hace de su mundo un escenario
Cuando vayas a minibar deberías probar el ramen en papillote. También hay especiales como chicharrón de soya con wakasabi (piensa en guacamole con wasabi); o Wagyu coronado con perlas de caviar y pétalos de girasol.
Los postres, como una rosquilla de hojicha frita y paté de frutas de cereza sobre miso “sable”, son un final poco ortodoxo.
